DEJÉMONOS HACER

SAN PELAYO
25 junio, 2023
Te doy gracias, Padre
8 julio, 2023

Mt 10,37-42.

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: «El que quiere a su padre o a su madre más que a mí no es digno de mí; el que quiere a su hijo o a su hija más que a mí no es digno de mí; y el que no coge su cruz y me sigue no es digno de mí. El que encuentre su vida la perderá, y el que pierda su vida por mí la encontrará. El que os recibe a vosotros me recibe a mí, y el que me recibe recibe al que me ha enviado; el que recibe a un profeta porque es profeta tendrá paga de profeta; y el que recibe a un justo porque es justo tendrá paga de justo. El que dé a beber, aunque no sea más que un vaso de agua fresca, a uno de estos pobrecillos, sólo porque es mi discípulo, no perderá su paga, os lo aseguro.»

 

Cada acontecimiento, amargo o dulce, es “Dios que viene a amarnos”… “Dejémonos hacer”. El abandono a su voluntad en todo lo que vivimos y hacemos, en las pequeñas cosas de cada día. Caminar en medio de nuestros hermanos, habitados por Dios. La historia de la salvación acontece en la historia misma de cada día donde Dios trabaja discreta e incesantemente.
“Quien abraza a Dios debe abarcar el espacio del mundo entre sus brazos; quien recibe el peso de Dios en su corazón recibe el peso del mundo.” Madeleine Delbrêl
Lee, medita, ora, contempla.