Celebramos hoy en los monasterios benedictinos la Fiesta de los santos Marta, María y Lázaro.
Jesús también necesitaba descanso, cariño, cuidados…
Un tiempo de paz para reanudar el camino. Lo encontraba en la casa de Betania.
ORACIÓN
Oh, Dios, que en la casa de Betania preparaste a tu Hijo
el afecto del amigo, la generosidad del anfitrión y la solicitud atenta del discípulo,
concédenos poder seguir así a este Maestro
como amigos, como personas que saben servir, como gente que escucha a los demás.
AMÉN