Repostería del Monasterio

 

OTROS DULCES


vinculados a fechas determinadas

PERIQUITOS DE NAVIDAD

Hasta donde alcanza la memoria comunitaria, se recuerda la costumbre de celebrar el final del carácter penitencial del Adviento con la llegada de las Ferias Mayores, del 17 al 23 de diciembre. Estos días tienen antífonas propias para el cántico de María, el MAGNIFICAT, y empiezan todas con la exclamación OH!

¡O SAPIENTIA! ¡O ADONAI! ¡O RADIX JESE! ¡O CLAVIS DAVID! ¡O ORIENS! ¡O REX GENTIUM! ¡O EMMANUEL!

El fin del ayuno era celebrado en una reunión comunitaria, en la que se entregaba a cada una de las monjas un paquete de pequeñas galletas en forma de O! Que simbolizaba la llegada ya muy cercana del Niño, precedido de sus dones y regalos.

El Adviento ha perdido su carácter penitencial pero mantenemos esta preciosa tradición que anticipa en las manos de cada una de las hermanas, el gozo de la Navidad con la llegada de los primeros dulces del niño.

ROSQUILLAS DE SAN BLAS

 

En el siglo XIX, nuestro monasterio recibió una reliquia de san Blas.

Procedía de la Comunidad de monjas benedictinas de Santa María de la Vega, también en Oviedo, que fue expulsada de su monasterio y recibida en nuestra casa. Con ellas trajeron la reliquia y la devoción al santo.

Hemos recuperado la tradición de las rosquillas de San Blas, extendida por muchos lugares.

También hoy el santo obispo mártir, convoca muchas personas que acuden a nuestro monasterio a venerar su reliquia pidiendo su intercesión para las enfermedades de garganta.