Ven a mi Fuente

XXIX Domingo del T. O. Ciclo C
19 octubre, 2019
Ora 30′. Oraciones disponibles aquí
21 octubre, 2019

 

¡Hola!

Así te veo, contemplando esta cascada de “agua fresca…” Es la que te ofrece Jesús.

Lo que es el agua para la vida normal, eso es Jesús para la vida humana. Jesús es el Agua, Jesús es La Palabra, Jesús es el que da el Espíritu. Jesús no es un pozo a donde se va a beber de vez en cuando, es una fuente de espíritu: el que bebe de Jesús es fuente. Él mismo siente brotar de dentro de sí el Agua que brota hasta la Vida eterna, y no tiene más sed de otras aguas, porque Jesús quita la sed de todas las otras cosas.

La vida que Jesús nos regala es así. Has realizado muchas cosas importantes. Pero ahora, quizás, tengas que enfrentarte a una mayor  responsabilidad: VIVIR,  es decir, extraerle a ese precioso don de la vida, toda su riqueza y orientarla,  no tanto para tu beneficio propio, sino para beneficio de todos los que te rodean. Se trata de una MISION: dar sentido a sus vidas. ¿Has pensado en esto? ¿Te sientes llamada para asumir ese desafío?  Alguien ha dicho que “para ser feliz, hace falta una sola cosa: ESTAR VIVO POR DENTRO”.

Todos, tenemos un “sello de calidad”: fuimos creados a imagen y semejanza de Dios, orientados hacia la belleza, hacia el amor y la felicidad, hacia la convivencia y la paz social.  O sea, no estamos desarmados ante los peligros del camino de la vida. Ese es el “norte”, que no podemos dejar de mirar si queremos llegar hasta donde nos llevan nuestros mejores sueños.

Guarda en el corazón lo que te ha llegado, del frescor de «ese agua»…sigue acudiendo a la Fuente.

 

En los enlaces adjuntos puedes encontrar manantiales de Vida donde poder beber.

Ora 30´

rezandovoy